Al igual que Zacatecas, Guanajuato es un estado geográficamente estratégico en México y un centro neurálgico en la historia de su independencia y su revolución. La mecha de la guerra de independencia se encendió en Guanajuato capital, en la Alhóndiga, un almacén de granos construido por los españoles.
Además, las calles, los monumentos, todo lleva el nombre de personajes históricos.
¿Entonces qué visitar en Guanajuato?
Guanajuato capital
Caminando en el centro de Guanajuato, uno de los primeros monumentos que se nos ofrece a nosotros es el Mercado Hidalgo. Allí se puede degustar platos tan picantes como sabrosos, y probar la especialidad local, las enchiladas mineras.
Un poco más lejos, encontramos el callejón del beso y guías locales que explican la leyenda que lo rodea.
Luego vienen la Basílica Nuestra Señora de Guanajuato y el Teatro Juárez. Esta maravilla es obra del arquitecto Antonio Rivas Mercado, y fue inaugurada en 1903. Es un modelo del estilo arquitectónico mexicano de finales del siglo XIX.
El interior es tan hermoso como el exterior, ¡realmente hace que quieras asistir a un espectáculo!
Es imposible visitar Guanajuato sin descubrir por sí mismo o sin que a uno le cuenten sobre la Alhóndiga de Granaditas. Esta bodega de granos construida a fines del siglo XVIII fue el teatro de una de las primeras acciones militares de la Guerra de Independencia de México en septiembre de 1810.
Ahora es el hogar del Museo Regional de Guanajuato, que recorre la historia de México desde la época colonial hasta los eventos que llevaron a la independencia y el establecimiento del México de hoy.
Inaugurado en 1975, el Museo Casa Diego Riviera fue fundado por su hija Guadalupe en la casa donde nació el famoso pintor Diego Rivera Barrientos María y donde pasó los primeros años de su vida.
La casa nos lleva a un viaje en el tiempo, acompañando al artista a través de las diferentes épocas e influencias artísticas de su vida.
En el auditorio, hay una copia de su obra “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central”, y cuya versión original de 16m x 4m ilustrando no menos de 75 personajes se exhibe en la ciudad de México, una visita obligada!!
El museo está abierto de martes al domingo, y la entrada cuesta 25 pesos (1 €).
En otro estilo, el Museo Iconográfico Don Quijote es único en su género. Fundado por el coleccionista Eulalio Ferrer Rodríguez, cuenta con más de 1200 piezas relacionadas con la obra de Miguel Cervantes, Don Quijote de la Mancha, hechas por artistas y autores mexicanos y extranjeros. Pinturas, grabados, dibujos, tapices, monedas, esculturas, porcelanas, cerámicas de diferentes épocas y de diferentes países constituyen la colección dedicada al caballero.
El Museo de las momias, la Universidad de Guanajuato y la Casa de las leyendas son otros lugares interesantes para visitar.
Finalmente, para ver todo esto al mismo tiempo, nada mejor que tomar el funicular (detrás del Teatro Juárez) o subir caminando hasta la estatua El Pípila y disfrutar de la vista panorámica de la ciudad.
León
Ubicada a 40 km de Guanajuato (1 hora en autobús), León no es la ciudad más interesante del estado de Guanajuato. Sin embargo, una parada de una noche puede ser agradable.
Es una oportunidad de degustar algunas especialidades locales, como las guacamayas, o beber la bebida roja Cebadina que se vuelve efervescente con bicarbonato de sodio y que se debe tragar rápidamente para no ahogarse por la bebida que va subiendo!
Como postre, el chef ofrece frutas con chile y queso, ¡disfrútalo!
Caminar en el centro de la ciudad es agradable, la oportunidad de ver algunos monumentos como el Teatro Manuel Doblado o el templo expiatorio.
San Miguel de Allende
Ubicada a 1.5 horas en autobús desde Guanajuato, San Miguel de Allende es una ciudad llena de encanto. Hay un ambiente muy agradable.
Mi visita comenzó con la fábrica La Aurora, anteriormente una fábrica textil convertida hoy en 65 galerías y espacios de exposición. ¡La entrada es gratuita, los aficionados más fervientes se perderán alegremente durante horas!
Pinturas, esculturas, antigüedades, decoración, textiles, joyas, ¡hay algo para todos los gustos!
Luego bajé al Parque Benito Juárez y al Paseo del Chorro, donde se fundó la ciudad. Desde aquí, puedes subir una serie de escaleras hasta llegar a un mirador que ofrece una vista panorámica de la ciudad.
Realmente me encantó pasear por las calles de San Miguel de Allende, sentarme en un banco del Jardín Principal, observar la vida y disfrutar de la Parroquia de San Miguel Arcángel.
Mi paseo me llevó al Museo de la Casa de Allende, que traza los cimientos de la ciudad y la historia de la independencia de México, pero también el Centro Cultural Ignacio Ramírez.
Con respecto a la comida, me encantó el restaurante Vía Orgánica, un restaurante que ofrece una variedad de especialidades mexicanas y mundiales, con productos frescos, ¡una delicia!
Pura Vida!
Para encontrar todos mis artículos relacionados con México, sigue este enlace.